264 escuelas de Moreno continúan cerradas a un mes de la trágica explosión por una pérdida de gas que se llevó la vida de Sandra Calamano, vicedirectora, y de Rubén Rodríguez, portero y auxiliar de cocina en la Escuela N° 49. Fue veinte minutos antes de que unos 500 chicos entraran a las aulas. En ese escenario, los directivos decidieron reforzar la exigencia para que haya obras de infraestructura inmediatas.
El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) ordenó que se hagan inspecciones de seguridad en todos los establecimientos educativos, oficiales y privados de todos los niveles existentes en el país, pero hasta el momento no hubo novedades sobre ese estudio.
Según sostienen desde la Dirección General de Cultura y Educación, a cargo de Gabriel Sánchez Zinny, en alrededor de 60 edificios ya se hicieron reparaciones y estarían en condiciones de abrir. "Mandan inspectores para ver si hay paro, si tenemos la escuela abierta o si los docentes vienen a clases, pero los inspectores encargados de la seguridad no vienen nunca", relató Luciano Casaux, director de la Escuela N°2 del barrio Zapiola.
El trágico episodio del pasado 2 de agosto le costó el cargo a ahora ex director de Infraestructura Escolar bonaerense, Mateo Nicholson, quien presentó su renuncia tal como lo hizo el por entonces interventor del Consejo Escolar de Moreno, Sebastián Nasif. Cabe recordar que Nicholson fue el funcionario del María Eugenia Vidal que, a través de un audio de Whatsapp, instó a "inventar" los presupuestos para obras escolares.