“No tengamos miedo, lo peor es eso. En la Argentina nos han llenado de miedos, de mensajes de cinismo, de que nada podía cambiar, pero los argentinos estamos cambiando”, enfatizó el presidente Mauricio Macri en entrevistas que concedió ayer a radios de Rosario y de Córdoba desde Chapadmalal donde pasa Semana Santa en compañía de su esposa y su hija Antonia. En sus declaraciones, Macri se quejó de que el gobierno provincial de Miguel Lifschitz no reconoce la inversión del gobierno nacional en el territorio; insistió en cuestionar la falta de adhesión a leyes como ART y sembró sospechas entre la relación de la Legislatura con “el sector mafioso que inventa juicios”. Señaló además que una eventual reforma constitucional debe evitar la creación de más cargos y más nombramientos.

El presidente habló en la mañana del Viernes Santo con la emisora cordobesa Cadena 3 y la rosarina LT2 de temas de ambas provincias, de cuestiones nacionales e incluso de la Selección nacional de fútbol.

En sus declaraciones a LT2, Macri dijo que “lo importante es que la Argentina está creciendo y Santa Fe ha sido una de las provincias que más reaccionó, es la única que levemente creció en 2016”, primer año de gestión de Cambiemos. No obstante, afirmó que la Provincia “tiene que tener un poco más de generosidad en cómo evalúa” los recursos que le lleva el Estado Nacional porque el país heredó un “altísimo déficit fiscal, de impuestos, de infraestructura”. En esto ratificó su compromiso de “cuidar a los argentinos, construir rutas acordes a un país tan grande y potenciar la conectividad aérea con aviones seguros y vuelos cada vez más baratos”.

Enseguida señaló que “la provincia tiene que tener generosidad en cómo las evalúa (las obras de Nación) porque la Argentina no tiene solo un altísimo déficit fiscal, heredamos una enorme falta de infraestructura y entre todas estas demandas de infraestructura no podemos hacer todo a la vez; entonces tenemos que fijar prioridades. Hay que tratar que la frazada alcance entendiendo que Santa Fe ha sido una provincia muy favorecida respecto a las demás” al recordar que junto a Córdoba fueron las únicas que recibieron el 15 por ciento de retorno por coparticipación “desde el día cero de nuestro gobierno”, en alusión al fallo favorable de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que tuvieron ambas provincias sobre finales de noviembre de 2015. “Por eso las cuentas de la provincia permitió que encararan distintas cosas que tenían pendientes. Y hay otras que todavía no ha hecho que la verdad que lamento”.

Los reclamos por leyes

En otra parte de sus declaraciones, Macri dijo que Santa Fe adhirió a algunas leyes nacionales importantes pero no lo hizo con la de Emprendedores y con la de Participación Pública Privada que crea las condiciones para realizar más obras de infraestructura. “Tampoco adhirió a la ley de ART para parar los litigios laborales, que amerita que las Pymes y los comerciantes no se fundan ante el primer juicio de trabajo”, advirtió para acotar “no sé por qué el Congreso de Santa Fe (por la Legislatura) tiene más vínculos con este sector mafioso, que inventa juicios”.

Agregó que “tenemos la buena noticia de que se crearon 600 mil trabajos en el último año, pero más de la mitad son informales porque la gente le tiene miedo a los juicios laborales. Hay que decirles ‘no a los que están enganchados con estos estudios y algunos jueces laborales’ y terminan generando daños a todo el país porque esto hace que haya menos empleos y de menor calidad”.

El presidente de la Nación pidió que los legisladores de la provincia “respeten a los santafesinos, que cuiden el presupuesto, porque hace falta más obras para mitigar las inundaciones, más transporte, más desarrollo de la economía de Santa Fe y más trabajo, además de recursos para mejorar la policía de la provincia”. En esa línea señaló que cualquier reforma en la Constitución provincial debe evitar la creación de “más cargos, más nombramientos” por la carga presupuestaria que implica. Subrayó que “para un trabajador que se levanta todos los días al alba, toma un par de colectivos y se pasa casi 12 horas fuera de su casa para tener un salario básico, lo siente como una estafa. Y lo es porque no hay trabajo real detrás de todos esos cargos”.