Son medidas contra cíclicas “que ayudará a las familias y a las empresas a enfrentar los efectos derivados del Covid-19” declaró el Consejo y añadió que “así se está en línea con las acciones adoptadas por otros organismos financieros internacionales”. Estas determinaciones según los especialistas, tendrán también “un impacto regional estabilizador”.

Las medidas anunciadas hoy se suman a las que ya fueron adoptadas el jueves pasado por el ministro Paulo Guedes. En la batería de soluciones anticipadas se incluyó el adelanto del pago del medio aguinaldo para los jubilados, que será efectivizado ya en abril. Esto significará volcar 5.000 millones de dólares al consumo. Otra disposición que aún está en estudio es ampliar los recursos para las asignaciones a las familias más pobres a través del programa “Bolsa Familia” que atiende a los sectores más vulnerables de la población.

Según advirtió Guedes, en una entrevista al diario Folha de San Pablo, él se vio “absolutamente sorprendido” en una reunión, una semana atrás, en la que se enteró de un estudio realizado por el Banco Central. En él se afirma que la velocidad de propagación del Coronavirus en Brasil superará a la de China y otros países. “Esto fue alarmante” indicó. En ese momento decidió crear un grupo de monitoreo de avance de la pandemia.

Esta mañana, el presidente Jair Bolsonaro reveló que el gobierno busca una manera de resolver la crisis de las aerolíneas brasileñas. “Vamos a actuar en esa cuestión porque las aéreas están perdiendo clientes. Entonces no queremos que quiebren, la peor alternativa que existe”. La reacción de Brasilia a los impactos del virus apunta a resolver problemas a las empresas que deben seguir pagando a sus empleados, a pesar de la paralización de sus actividades. El problema principal reside en las empresas de servicios y las Pymes, con falta de dinero para enfrentar los gastos salariales y los pagos a proveedores. En ese sentido, las resoluciones del Consejo Monetario Nacional darán “aliento al menos por los próximos 6 meses”. Entre los objetivos del gobierno está el de evitar los despidos.

Con todo, las respuestas de los mercados financieros no acompañan las intenciones de Bolsonaro y su equipo económico de reactivar la economía a todo precio. La Bolsa de San Pablo vivió este mediodía una nueva paralización de los negocios, después de caer más de 12%. Al mismo tiempo, el dólar comercial ya estaba prácticamente en 5 reales. Pero el cambio para las personas y empresas se ubicó ya en 5,20. El temor, indicaron las consultoras bursátiles, es que esos instrumentos que apuntan a la protección del sistema financiero y al estímulo del consumo pueden tener “una eficacia limitada en el tiempo”.

Claro que Brasil no es una excepción, ya que repercute el escenario internacional, donde las acciones de emergencia de la FED, en Estados Unidos, lejos de calmar parecen haber suscitado pánico. “El Coronavirus está presente en la economía global y se ampliará todavía más en la zona del Euro, en Estados Unidos y en Brasil” informó una de las consultoras, Mirae Asset a sus clientes.