Después de idas y vueltas, el Gobierno autorizó a los empleadores a convocar al trabajo a las personas de riesgo que sean vacunadas, salvo algunas excepciones. La medida fue oficializada este viernes a través de una resolución conjunta del Ministerio de Salud y el de Trabajo en respuesta a los pedidos de la UIA y la CGT, que desde hace meses exigían la flexibilización de la dispensa de asistir al trabajo para mayores de 60 años, embarazadas y personas con enfermedades prexistentes.
En concreto, la normativo dispone en su primer artículo que "los empleadores y las empleadoras podrán convocar al retorno a la actividad laboral presencial a los trabajadores y las trabajadoras, incluidos los dispensados y dispensadas de la misma por encontrarse comprendidos en los incisos a), b) y c) del artículo 1° de la Resolución del MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL N° 207/2020 y sus modificatorias, que hubieren recibido al menos la primera dosis de cualquiera de las vacunas" contra el Covid.
La resolución 207/2020 del Ministerio de Trabajo dispuso en marzo del año pasado la suspensión del deber de asistencia al trabajo con goce de remuneraciones para mayores de 60, embarazadas y grupos de riesgo, una medida que luego se renovó mediante otras resoluciones y el DNU 125/2021 que en febrero pasado definió que "mantendrá su vigencia hasta tanto ese Ministerio en forma conjunta con el MINISTERIO DE SALUD de la Nación dicten normas en su reemplazo".
La medida se resolvió en el marco de las nuevas restricciones oficializadas el jueves a través de un DNU que mantuvo la suspensión del deber de asistir al trabajo para los grupos de riesgo hasta tanto se definan cambios. La resolución conocida este viernes flexibilizó dicha norma al establecer condiciones para el retorno de dichas personas, sin importar la edad o la condición de riesgo, una vez transcurridos 14 días desde la inoculación.
En el caso de los trabajadores de la salud "con alto riesgo de exposición", el segundo artículo establece que "podrán ser convocados una vez transcurridos CATORCE (14) días de haber completado el esquema de vacunación en su totalidad, independientemente de la edad y la condición de riesgo", con excepción de aquellos que padezcan ciertas enfermedades como inmunodeficiencias, sean pacientes oncológicos o transplantados.
Por otra parte, el personal con dispensa convocado deberán presentar "constancia fehaciente de vacunación correspondiente o manifestar, con carácter de declaración jurada, los motivos por los cuales no pudieron acceder a la vacunación". Asimismo, "quienes tengan la posibilidad de acceder a la vacunación y opten por no vacunarse, deberán actuar de buena fe y llevar a cabo todo lo que esté a su alcance para paliar los perjuicios que su decisión pudieren originar a los empleadores o empleadoras".
En cambio, siguen exceptuados de asistir al trabajo las personas con Inmunodeficiencias congénita, asplenia funcional o anatómica (incluida anemia drepanocítica) y desnutrición grave, VIH dependiendo del status (< de 350 CD4 o con carga viral detectable), y personas con medicación inmunosupresora o corticoides en altas dosis (mayor a 2 mg/kg/día de metilprednisona o más de 20 mg/día o su equivalente por más de 14 días).
También mantendrán la dispensa los pacientes oncológicos y trasplantados: con enfermedad oncohematológica hasta seis meses posteriores a la remisión completa, con tumor de órgano sólido en tratamiento, y trasplantados de órganos sólidos o de precursores hematopoyéticos.
En cambio, ya no gozarán de la dispensa las personas con enfermedades respiratorias crónicas: hernia diafragmática, enfermedad pulmonar obstructiva crónica [EPOC], enfisema congénito, displasia broncopulmonar, traqueostomizados crónicos, bronquiectasias, fibrosis quística y asma moderado o severo; personas con enfermedades cardíacas: insuficiencia cardíaca, enfermedad coronaria, reemplazo valvular, valvulopatías y cardiopatías congénitas.
La suspensión de las licencias alcanza también a las personas diabéticas, con insuficiencia renal crónica en diálisis o con expectativas de ingresar a diálisis en los siguientes seis meses, con certificado único de discapacidad, y obesidad.
Los cambios son similares a una propuesta elevada por la Unión Industrial Argentina (UIA) para flexibilizar la dispensa a las presonas de riesgo que hayan recibido la vacuna o se nieguen a hacerlo. Junto con dirigentes de la CGT, los empresarios venían reclamando la suspensión del regimen de dispensas laborales al Ministerio de Producción, el de Trabajo y Jefatura de Gabinete, pero la medida era demorada por las dudas en Salud en medio de la explosión de contagios.
Las propuestas incluían el fin de la dispensa, la jubilación anticipada y la reducción de cargas patronales para reemplazar empleados con licencia por nuevos, como propuso la cámara metalúrgica ADIMRA.
En la industria, se estima que entre el 10% y 12% de la dotación fabril se encuentra alcanzada por la licencia por Covid, lo que equivale a 144.000 trabajadores -incluyendo a los no registrados-. "Hace un año que la población de riesgo está dispensada, el que se vacuna tiene que ir a trabajar y el que no quiere vacunarse, no tiene más dispensa", dijo a iProfesional el vicepresidente de UIA, Daniel Funes de Rioja, quien aseguró que la idea de flexibilizar la dispensa encontró "buen eco" en las autoridades.
Otra de las medidas sugeridas por el sector fabril era el acceso a vacunas por parte de las compañías para inmunizar a su personal, pero por ahora el Ejecutivo se opone a esa alternativa. Solo la Ciudad distribuyó vacunas a las prepagas privadas, una medida que generó polémica en un escenario de escasez. Pese al pico de 23.000 contagios registrado este jueves, los industriales afirman que "la nueva ola ataca más a los jóvenes" y que tanto los empleadores como los gremios "cuidan" a su personal.
Dentro del ámbito sindical, el líder de la Unión Obrera Metalúrgica, Antonio Caló, y su par de la Asociación Obrera Textil, Hugo Benítez, también le hicieron saber a los funcionarios su interés por cubrir los puestos vacantes por la dispensa laboral mediante un sistema de jubilación anticipada o beneficios fiscales ante la imposibilidad de aplicar el teletrabajo en el caso de los puestos vinculados a las líneas de producción.
En el sector público, el Gobierno extendió desde este martes el teletrabajo para toda la administración pública nacional hasta el viernes próximo en vistas del incremento de casos. Previo a esa medida, el 50% de los agentas (salvo PAMI y ANSES) estaban dispensados o con trabajo remoto. En ese marco, el gremio estatal ATE se mostró favor de la modalidad presencial, pero exige la continuidad de las licencias, incluido el personal vacunado.
Algunas provincias, sin embargo, forzaron el retorno de personal de salud vacunado pese a gozar de licencia y previo a la nueva resolución, según un informe que elevó la Federación de Personal de Salud (Fesprosa) al Ministerio de Salud. Según los datos oficiales, los fallecidos sumaron este miércoles la cifra de 56.832, siendo en su gran mayoría adultos mayores de 60 años, quienes en la mayoría de los distritos aún no fueron vacunados.