Boudou volvió a la cárcel luego de recibir una condena de casi 6 años
08-08-2018 | Politica
 Además le aplicaron una multa de 90 mil pesos y lo inhabilitaron “en forma perpetua” para la función pública. Duras condenas para su socio , José María Núñez Carmona, y Nicolás Ciccone. Está en Ezeiza

 El ex vicepresidente Amado Boudou fue condenado ayer a 5 años y 10 meses de prisión efectiva, ya que un tribunal federal determinó que es culpable en la causa por la venta de la ex Ciccone. El tribunal, además, le aplicó una multa de 90 mil pesos y lo inhabilitó “en forma perpetua” para la función pública y pidió además la “inmediata detención” del ex funcionario.

Boudou fue detenido y trasladado ayer mismo a la cárcel de Ezeiza, donde había estado detenido el año pasado. En ese penal están presos también José López, ex secretario de Obras Públicas, el empresario santacruceño Lázaro Báez, el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime y el ex jefe de la Uocra de nuestra ciudad, Juan Pablo “Pata” Medina.

Los jueces Bertuzzi, Gabriela López Iñiguez y Guillermo Costabel fueron quienes dieron por concluido el debate y, sin tomar en cuenta un planteo para suspender el veredicto por parte de la defensa de Boudou, adoptaron la histórica decisión: por primera vez uno de los más altos cargos del Ejecutivo va preso por corrupción.


Los magistrados encontraron a Boudou “autor penalmente responsable de los delitos de cohecho pasivo y negociaciones incompatibles con la función pública”.

El presidente del tribunal pronunció la sentencia -apenas dos meses menor a la máxima posible, de seis años- tras unas pocas palabras que explican ese número: ambos delitos fueron juzgados “en concurso ideal”, es decir que no se sumaron las penas correspondientes a cada uno: se unificó esa cifra por considerarse que ambas infracciones se cometieron en un solo hecho.

La segunda explicación para la condena es que los delitos contra la administración pública tienen penas bajas, “ampliando aún más el portal de impunidad ya lo suficientemente grande a causa de las demoras procesales”.

Si el Congreso llegara a aprobar el anteproyecto de Código Penal que una comisión presidida por el camarista Hernán Borinsky ya tiene listo, casi todas las penas para la corrupción serán más altas, con cotas de 12 años

La prisión fue efectiva de manera inmediata, al igual que en el caso de su amigo y es socio, José María Núñez Carmona (condenado a 5 años y medio), y del empresario Nicolás Ciccone (4 años y medio), aunque en este último caso se cumplirá de manera domiciliaria por la edad del ex dueño de la empresa que fabrica billetes.

Boudou y Núñez Camona, ya estuvieron en el Penal de Ezeiza durante 70 días por orden del juez Ariel Lijo, que los acusó de enriquecimiento ilícito. Fue la Cámara Federal porteña la que posteriormente ordenó excarcelarlos. Ahora, después de siete meses, vuelven.

Para Alejandro Vandenbroele, imputado colaborador en causa conexas a la investigación por la compra-venta de Ciccone, la pena fue de dos años de prisión en suspenso y cuarenta horas de tareas comunitarias.

Guido Forcieri ex jefe de Gabinete en el ministerio de Economía, recibió dos años y medios en suspenso y también tareas comunitarias.

Y para Rafael Resnik Brenner, ex funcionario de la AFIP, la sentencia fue de tres años en suspenso. Todos fueron condenados como partícipes necesarios de la maniobra que devino en la adquisición de la ex calcográfica.

Tramitada casi en su totalidad por el juez Lijo y el fiscal Jorge Di Lello, la causa inicialmente estuvo a cargo de Daniel Rafecas y Carlos Rívolo. El primero fue desplazado del expediente luego de que se conociera que intercambió mensajes de Whatsapp con un allegado al caso. El fiscal fue removido por pedido de la defensa Boudou.

Al ex vice se lo acusó por interceder ante la AFIP, siendo ministro, para solicitar una moratoria para que la imprenta evitara la quiebra, y de haber hecho ingresar como supuesto testaferro a Vandenbroele, dueño de The Old Fund. Siempre negó conocerlo.

ÚLTIMAS PALABRAS

Ayer Boudou optó por dar un último mensaje antes de conocer el veredicto. Y fue con una defensa política hablando de su gestión en el gobierno de Cristina Kirchner y criticando a la administración actual. Confió que es un “pase de factura” por haber estatizado las AFJP. También habló Nuñez Carmona, el otro detenido, que se quebró al mencionar a sus amigos, entre ellos el arrepentido Vandenbroele.