Vidal le pidió a Ritondo que investigue quién está detrás de su espionaje
09-04-2019 | Politica
 La mandataria bonaerense encargó una investigación a Asuntos Internos de la Bonaerense para saber quién encargó los informes sobre su vida privada que se encontraron en la casa del falso abogado D’Alessio.  

 La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, mandó a realizar una investigación propia para saber quién y por qué la espiaban, luego del escándalo que se desató por los “informes de inteligencias” que se encontraron en poder del falso abogado Marcelo D’Alessio en su casa.

En ese contexto, la mandataria de Cambiemos ordenó a Asuntos Internos de la Policía Bonaerense – a cargo del ministro Cristian Ritondo - que empiece por el seguimiento de las actividades de los ex comisarios Aníbal De Gastaldi y Ricardo Bogoliuk, detenidos por orden del juez de Dolores Alejo Ramos Padilla y socios de D"Alessio. Asimismo, según publicó Clarín, Vidal también pidió que se investigue al ex superintendente de Policía, Daniel Salcedo.

Los tres, según la presunción, habrían participado activamente o en forma colateral en la red de espionaje armada contra Vidal desde una central de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) que funcionaba en el Conurbano.

La dependencia, creada en 2016, tenía como objetivo la colaboración de la AFI en la represión del narcotráfico y, además, indagar sobre las implicancias del negocio de la droga en los nichos de la corrupción policial. Al frente de esa estructura designaron a Salcedo y en la lista de colaboradores encubiertos u orgánicos aparecen mencionados oficiales retirados como De Gastaldi y Bogoliuk.

 

D"Alessio los mencionó en su testimonio ante el juez Ramos Padilla. Declaró que ambos eran sus mandantes dentro de la estructura de esta banda dedicada a extorsionar empresarios y – tras admitir en indagatoria el seguimiento a Vidal – los investigadores secuestraron en su casa una carpeta con data de esa vigilancia ilegal que involucraba a De Gastaldi y Bogoliuk.

El espionaje a Vidal levantó más aún las tensiones entre la Gobernación bonaerense y la Casa Rosada, a lo que luego se sumó el episodio entre la Policía Bonaerense y la Federal, que volvieron a dejar en evidencia los conflictos.

En una estación de servicio del Acceso Sudeste, en Avellaneda, una comitiva de la Policía Federal intervino -por orden judicial- en la aprehensión de oficiales bonaerenses extorsionadores de un presunto traficante de drogas. El operativo terminó con un oficial provincial muerto y dos agendas de la Federal heridos.

Por otro lado, la necesidad de Vidal de saber quién estaba detrás de su espionaje también desató el pedido de la Gobernadora para desmantelar la AFI, algo que fue respaldado por la Coalición Cívica de Elisa Carrió.

Como respuesta, el director de la central de inteligencia, Gustavo Arribas, y la subdirectora, Silvia Majdalani, se presentaron ante la Bicameral del Congreso para dar explicaciones, aunque las mismas fueron escasas. D’Alessio “no pertenece” a la central y tampoco De Gastaldi, fue lo que informaron.