En abril, las financiaciones bancarias cayeron 39,8% en términos reales
09-05-2019 | Economia
 Informe monetario del BCRA

 El BCRA publicó el Informe Monetario de abril que mostró una dinámica controvertida ya que, mientras los depósitos bancarios crecieron, los créditos de las instituciones financieras cayeron. La diferencia se quedó en la apuesta de los bancos por la súpertasa que ofrecen las Leliq, que no dejó de subir durante el mes pasado.


La evolución de esos indicadores, que resulta lesiva tanto para el consumo de los hogares como para las posibilidades de inversión de las empresas, se vio con claridad: los depósitos a plazo fijo en pesos del sector privado crecieron 1,8% contra marzo. En cambio, los préstamos, tal como mostró el informe del BCRA, cayeron 0,2%, con un negativo interanual de 4% (caída real de 39,8%). A la par, el porcentaje de los depósitos volcados a Leliq por las entidades bancarias subió hasta 36,6% desde el 34,9% de marzo. Una diferencia de 1,7 puntos.

La explicación apareció en la parte del informe oficial que refirió a la tasa ofrecida por la herramienta con la que el BCRA buscó combatir a las presiones cambiarias durante el mes pasado: "La tasa promedio de Leliq aumentó 5,8 puntos entre fines de marzo y abril, ubicándose en 73,9% al término de este último mes".

El gran número fue la caída de los créditos. "La reversión del signo de la variación mensual respecto a los dos meses previos estuvo explicada mayormente por el menor dinamismo de las financiaciones con tarjetas de crédito", explicó el BCRA. Y explicó: "La disminución mensual que registraron las financiaciones con tarjetas de crédito fue de 0,5% (nominal desestacionalizada) y en los últimos doce meses acumularon un crecimiento nominal cercano a 20%".

Si se toma en cuenta una inflación interanual de 56,7% en abril, siempre y cuando se cumpla la proyección de los privados un IPC en torno a 4% el mes pasado, la contracción real de las financiaciones con tarjeta de crédito fue de 24,5%. La caída contra marzo sería de 4,4%.


Por su parte, la merma nominal de 4% del total de los préstamos en pesos significaría una contracción real de 39,8%.

Tanto los préstamos personales como los comerciales registraron caídas reales, tanto en las comparaciones con marzo como en las interanuales.