En la Ciudad existen 376 patios de juegos infantiles distribuidos en plazas y parques. Son fácilmente reconocibles, pero no tienen una separación física del resto del espacio verde. Y, aunque parezca increíble, no estaba prohibido fumar en ellos ni en las áreas que los rodean. Por eso, los chicos estaban expuestos al humo de los fumadores.

Pero ya no. El objetivo de la ley es "mejorar la calidad del aire circundante a los patios de juegos existentes en parques y plazas de la Ciudad de Buenos Aires" y "reducir el riesgo para la salud de los chicos", según se explica en su texto.

“Este nuevo proyecto es un paso más en la política de respeto en la convivencia. Todos conocemos lo dañino que es el tabaco y el objetivo es proteger a nuestros niños en su ámbito natural que son las plazas y los parques”, explica Francisco Quintana, vicepresidente 1° de la Legislatura.

Aquellos que transgredan la norma y fumen dentro de las áreas de juegos infantiles, enfrentarán multas de $ 1.200 a $ 30.000 o penas de 6 a 60 días de arresto. Es que el artículo 5° de la ley establece que su incumplimiento se sancione en función de lo previsto en el artículo 54 del Código Contravencional para quienes arrojen sustancias u objetos dañinos en lugares públicos. Las penas para esa contravención son de $ 600 a $ 15.000 de multa o de 3 a 30 días de arresto. Pero la sanción se duplica cuando la acción se realiza en espacios adonde concurren niños.

No todos los legisladores estuvieron de acuerdo con la gravedad de las penas. Por eso ese artículo fue votado en particular y, aunque fue aprobado, no tuvo el consenso de la ley en general recibió 32 votos a favor, 16 en contra y 5 abstenciones.

La norma establece que el Ministerio de Salud tendrá a su cargo el desarrollo de campañas de concientización y educación en coordinación con el Programa de Prevención y Control del Tabaquismo. Por su parte, el cuerpo de Guardaparques del Sistema de Seguridad Pública de la Ciudad deberá hacer campañas de orientación y educación sobre normas básicas de convivencia en espacios públicos.

En enero, el Gobierno porteño lanzó una votación para que la gente decida si había que explicitar la prohibición. En total, recibieron 827.595 votos a través de la web y las redes sociales del Ejecutivo. El 80% de los votantes (660.448) estuvieron de acuerdo con que las áreas de juegos sean libres de humo. Y el 20% (167.147) consideró que no se puede restringir la libertad de fumar en esos espacios.

Los resultados de la votación acompañaron el proyecto ahora aprobado, que fue presentado por el legislador Guillermo González Heredia (Vamos Juntos). Otro de los puntos de la ley ordena señalizar las zonas libres de humo en las plazas y hacer campañas de comunicación en cada una para que la gente las respete.

Los chicos expuestos al humo del cigarrillo tienen cuatro veces más riesgo de padecer cáncer de pulmón en la adultez que los que no lo están. Y un 40% más de riesgo de sufrir cáncer de vejiga. Además, pueden desarrollar alergia a los alimentos, problemas en la piel o, sobre todo, afecciones respiratorias, como tos crónica, disminución de la capacidad pulmonar, asma, bronquitis y neumonía.

Según un informe regional, el cáncer de pulmón causa 60.000 muertes al año en América Latina
De acuerdo a un informe del Ministerio de Salud de la Ciudad, los niños respiran más rápido que los adultos y aspiran más productos químicos nocivos por kilogramo de peso. Por eso la exposición al humo del cigarrillo es más dañina para ellos.

En varias ciudades y países del mundo se impulsan leyes para liberar de humo espacios públicos. Por ejemplo, en 2011 se implementó una ley antitabaco a nivel nacional que prohíbe fumar en parques infantiles y zonas de juegos, así como en escuelas, restaurantes, bares, discotecas y accesos de hospitales. Mientras, en la ciudad holandesa de Groningen desde 2017 está prohibido fumar en los espacios públicos.