En medio de la ola peronista, el espacio K se impone en las primeras tres secciones electorales (las más pobladas de la provincia) mientras que Cambiemos gana las otras 5, en el interior bonaerense, donde Kicillof recuperó votos pero no pudo dar vuelta la supremacía del oficialismo en ese sector.
Juntos por el Cambio pierde la provincia pero logra retener algunos municipios importantes como el caso de La Plata, donde Julio Garro vence a Florencia Saintout, una de las principales apuestas de Alberto Fernández. También logró el triunfo en Mar del Plata, San Nicolás y Bahía Blanca.
Para Ramiro Tagliaferro (Morón) y Martiniano Molina (Quilmes) las cartas parecen echadas y todo indica que estarían perdiendo sus cargos. En cambio, Néstor Grindetti (Lanús), Diego Valenzuela (Tres de Febrero) y Nicolás Ducoté (Pilar) dan pelea. En Quilmes, Martiniano Molina la tiene aún más complicada. Son 22 puntos de diferencia entre las listas del espacio de Frente para Todos, cuya candidata este domingo es la camporista Mayra Mendoza. Más allá de la enorme distancia, cerca del ex cocinero también resaltan el corte de boleta y los números iniciales marcan una tendencia que parece irreversible.
Además, San Isidro mantuvo la diferencia a favor de Gustavo Posse, al igual que Jorge Macri en Vicente López, dos bastiones macristas de la zona norte del conurbano.
En tanto, el Frente de Todos va a seguir gobernando en Avellaneda, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Florencio Varela, Malvinas Argentinas, Esteban Echeverría, San Martín y Hurlingham.