El kirchnerismo bloqueó la ley que prohíbe candidatos condenados por corrupción
21-11-2019 | Politica
 Sus diputados no dieron quórum para debatir la ley de "ficha limpia", reclamada por 300 mil ciudadanos. Sólo fueron algunos peronistas y los puntanos, pero también faltaron oficialistas. El kirchnerismo bloqueó la ley que prohíbe candidatos condenados por corrupción

El kirchnerismo impidió este jueves que la Cámara de Diputados trate la ley de "ficha limpia", que prohíbe a los condenados por corrupción ser candidatos.

A las 11.30, media hora más tarde que la hora de convocatoria, el salteño Alfredo Olmedo, en su última sesión, pidió la palabra para pedir levantarla porque se había cumplido el plazo reglamentario.

Había 101 bancas ocupadas, la mayoría de Cambiemos pero también había algunos justicialistas como Graciela Camaño, Pablo Kosiner, Javier David y Marco Lavagna; y Juan Brügge, de la democracia cristiana. También arribaron los puntanos Karim Alume Sbodio y Victoria Rosso; y el santafesino Luis Contigiani.

Con Martín Lousteau y sus dos aliados (Carla Carrizo y Teresa Villavicencio), Cambiemos debería reunir 111 votos, por lo cual dejó muchas bancas vacías que contribuyeron a quedar lejos el quórum.

La ley de ficha limpia fue una de las tantas que se discutió durante los cuatro años de gestión de Macri, con un dictamen caído en la Cámara de Diputados y otros dos despachados unos días antes de las primarias, en las que Alberto Fernández obtuvo una victoria decisiva.

El peronismo unido emitió un dictamen en agosto que proscribía candidatos con otros delitos, pero prefirió no tratarlo.

Una norma similar fue aprobada en Brasil y es promovida por ONGs internacionales como Change.org, que el lunes acercó más de 300 mil firmas para pedir su tratamiento.

"Nuestro dictamen propone que aquellas personas condenadas por cierto tipo de delito, que tengan una condena confirmada en segunda instancia, queden inhabilitadas para ser candidatos en cargos públicos. Hoy en día eso no ocurre: Un trámite suele durar décadas", explicó Pablo Tonelli, miembro informante del dictamen emitido por Cambiemos pocos días antes de las primarias.


Ese día el peronismo, unido como en la elección consagró a Alberto Fernández, sorprendió con un dictamen propio que amplía la cantidad de delitos alcanzados a la proscripción. Además de corrupción, incorpora otros como tráfico de drogas, contrabando, lavado de activos y de dinero, evasión, apropiación indebida de tributos, evasión de recursos de la seguridad social y delitos tributarios.

Y, lo más relevante, la proscripción recién correría con sentencia firme, o sea, un fallo confirmatorio de la Corte Suprema. "Era una trampa para que no saliera nada", los acusó la radical cordobesa Brenda Austin, que mantuvo un duro cruce con Carrió cuando se le acercó a interrumpir su discurso.

Camaño le reprochó a los jefes de bloque no haber logrado incluir la ley en el temario de este miércoles y pidió no partidizar el debate por corrupción. "Es una corrupción humana. Corruptos y honestos los hay en todos lados", trató de consensuar. "No pudimos debatir este tema el miércoles porque no había acuerdo político. Si no lo hubiéramos hecho", se defendió Mario Negri.

Carrió, que dejará su banca en marzo, llegó tarde, aceptó que corruptos hay en todos lados, "pero hay que ponerle nombre y apellido. Y denunciar la corrupción cuando se es oficialismo también".

Repasó la historia de las leyes para limitar fueros y consideró que Cristina Kirchner no debería haber sido candidata por tener varias condenas judiciales. "Lo que pasa es que acá no se aplica el derecho. Hay personas que no tendrían que haber sido elegidas por la simple razón de que no podrían ejercer el cargo por estar en prisión preventiva. Me estoy refiriendo a la vicepresidenta electa. Esa es la ley que ella y yo escribimos", rememoró.

"Si ahora renuncio a la banca es para que, a partir de marzo, si los señores del PJ o el Frente para la Victoria quieran venganza, no necesitan perturbar al Parlamento, solo tienen que ir a buscarme y yo tengo la valija lista con todos los camisones rayados para ir a la cárcel común", amenazó al medio recinto vacío.

Relató, además, su primera conversación con Macri en la que le pidió combatir la corrupción y no hablar nunca con su fallecido padre. "Todo el resto de la clase política se había sentado en la mesa de Macri padre, así que nadie se haga el inocente, yo no".

Fernando Iglesias había pedido un aplauso para Carrió, "con quien me peleé en muchas ocasiones" y recordó que las primeras denuncias por corrupción que hacían hace 10 años tenían la compañía de la UCR. "Es la muestra de que estamos todos juntos. Los delitos de corrupción son atentados contra el sistema democrático".