Giacobbe & Asociados compartieron los resultados de su encuesta realizada entre el 22 y 24 de septiembre sobre 2500 casos y con un margen de error del 2%. Sobre los resultados se pueden compartir los siguientes datos a continuación:

La imagen de Alberto Fernández vuelve a caer otros diez puntos tras las PASO llegando a 17.5%. Estamos hablando de una disolución de su prestigio muy severa. No lo respetan ni los propios. Su imagen negativa alcanza 68.2% y resulta lógico considerando que el 70% de los votantes en las elecciones no votaron al Frente de Todos. “Títere”, “inútil” y “mentiroso” son las palabras que más asocian con su figura.

Sin embargo, el 47.5% opina que la culpa del resultado la tiene Cristina, dato superior al 35.3% que lo cree de Alberto. Un cándido 16.7% cree que la culpa la tiene la pandemia, o sea, que ni siquiera todo el público del Frente de Todos pone el problema “afuera”, sino que la mitad lo pone “adentro”.

En cuanto a la oposición, Patricia Bullrich posee una imagen positiva del 48.9% y una negativa del 31.6%, superando de esta forma al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, que tiene 35.7% de imagen positiva y 27.3% de negativa.

Las imágenes de los ministros nuevos son muy bajas. Oscilan todos entre 12.3% y 18.5% de positiva, y los más cruciales superan cómodos el 60% de negativa; tales son los casos del jefe de Gabinete, Juan Manzur y el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández que tienen 66.5% y 67% de imagen negativa respectivamente.

Sin embargo, el 29% (casi 30%, que es lo que obtuvo el Frente de Todos en las PASO) opina que los cambios son positivos. Mientras que un 69.5% cree que los cambios son negativos.

Alberto Fernández explica que ha salido fortalecido de los cambios de gabinete, y que ahora está rodeado de viejos amigos y compañeros de trabajo, pero solo el 5.9% de la población coincide con él. En cambio, el 43.3% de la población hubiera preferido que Alberto aceptara todas las renuncias y decidiera gobernar solo con el peronismo.

Por otro lado, el 33.5% cree que Cristina salió más fortalecida con los cambios y el 43.4% opina que ninguno se salió fortalecido. Solo un 16.1% cree que los cambios afectaron positivamente a ambos.

Aquel 30% que desde hace un año quería que el gobierno ganara las elecciones, después de las PASO cayó al 25.1%. Ahora le queda convencer a un 9.9% (los que dicen que “les da lo mismo”) para el 14 de noviembre. Es decir que el techo del Frente de Todos es 35% nacional, haciendo difícil la posibilidad que puedan la vuelta cuando el 64.4% quiere que pierda.

Las perspectivas para el futuro también son mayormente negativas, el 67.9% cree que el gobierno terminará mal o muy mal mientras que solo el 22.4% cree que el gobierno de Alberto Fernández va a terminar muy bien o bien.