Este martes funcionarios de la Secretaría de Tránsito y Transporte participaron virtualmente de la reunión de las comisiones de Tránsito y Transporte, Justicia y Asuntos Constitucionales de la Legislatura porteña para explicar los principales lineamientos del proyecto Integral de Convivencia Vial que busca mejorar el desempeño de los conductores y la calidad de los procesos de obtención de la licencia.

Con el objetivo de formar conductores responsables la iniciativa propone: Establecer un plan de mejora continua en el otorgamiento de las licencias; más y mejor educación vial y capacitación de formadores; y penas y sanciones ejemplificadoras.

En lo que respecta a este último punto, con la nueva normativa todos los conductores que den positivo en un control de alcoholemia serán inhabilitados por un mínimo de dos meses y un máximo de dos años. Además, dependiendo del dosaje arrojado se implementarán las siguientes sanciones:

- Entre el mínimo permitido y 1 gr/l: multa de 150 ($7.950) 1000 UF ($53.000) y la inhabilitación de la licencia (de 2 a 4 meses). Si aprueba el curso de educación vial, el plazo se reduce a la mitad en la primera falta. Se mantiene el acarreo de vehículo y la retención de la licencia de conducir.

- Desde 1 gr/l en adelante: multa de 300 ($15.900) a 2000 UF ($106.000) o 1 a 10 días de arresto. Inhabilitación de la licencia aplicada siempre (4 meses a 2 años). El caso no podrá ser dejado en suspenso. En la primera contravención el plazo de inhabilitación se puede reducir a la mitad si se aprueba el curso de seguridad vial.

Según transmitió la titular de la Comisión de Tránsito y Transporte Cristina García (VJ) lo más importante que hay que saber del proyecto es:

1. Inhabilitación de conducir para quienes den positivo en un control de alcoholemia. Dependiendo del dosaje arrojado se implementarán diferentes sanciones y se mantiene el acarreo del auto y la retención de la licencia.

2. El examen de manejo para conductores particulares será en calle con autos doble comando y ya no se evaluarán seis maniobras, como sucede ahora, sino que se tendrán en cuenta la técnica de manejo, el respeto por las normas y la convivencia con otros actores.

3. El examen en calle es un escenario más realista y muy similar al que va a enfrentarse el aspirante cuando tenga su licencia y además mejora y acerca su experiencia a lo cotidiano.

4. Y, si sos un buen conductor, el proyecto propone un cambio en la vigencia de las licencias de conducir para incentivar el cumplimiento de las normas y el compromiso con la convivencia vial. Las nuevos tiempos de vigencia serán:

- De 16 a 39 años: hasta 10 años de vigencia
- De 40 a 49 años: hasta seis años de vigencia
- De 50 a 69 años: hasta cuatro años de vigencia
- A partir de 70 años: hasta dos años de vigencia

En tanto, el examen psicofísico también traerá novedades en el área visual, psicológica y médica.

Con respecto al scoring, una vez aprobada la ley a quienes se les haya descontado puntos por infracciones podrán realizar un curso específico de educación vial relacionado a las faltas cometidas para que se le reasigne el 50% de los puntos descontados. También se podrá acceder a un curso para recuperar cuatro puntos una vez por año siempre que el conductor no haya alcanzado los 0 puntos.

El proyecto de ley también prevé que se profesionalicen los instructores de las academias en el Gobierno de la Ciudad con el objetivo de estandarizar el dictado de contenidos.

“Con el compromiso de todos nos va a ayudar a alcanzar lo que nos propusimos: reducir 50% las muertes por siniestros viales para 2030”, resaltó García.

A raíz de una consulta del diputado Ariel Álvarez Palma (UCR Evolución), desde el Gobierno porteño aclararon que, a partir de enero, 13 de las 15 Comunas brindarán el servicio de renovación de licencias (excepto la 9 y la 11 por cuestión de espacio) y que se va a lanzar una licitación por 30 vehículos de doble comando para cubrir la demanda de otorgamiento de licencias.